En los últimos años, las impresoras 3D de alta resolución se han vuelto más asequibles, más fáciles de usar y más fiables. Como resultado, la tecnología de impresión 3D ahora es accesible para más empresas y para los usuarios particulares, pero elegir entre las diversas soluciones de impresión 3D de la competencia puede ser difícil. A continuación, te hablaremos de las diferencias y problemas entre la tecnología de impresión 3d FDM y SLA.
Ambas tecnologías de impresión son las más utilizadas en la actualidad. Estas impresoras 3D tienen unas cuantas características en común. Entre ellas destacan el bajo precio, la facilidad de uso y la versatilidad de diseños que puedes crear. El principal aspecto a considerar para la elección entre una u otra tecnología es la calidad de las piezas que quieras obtener y el tamaño de las piezas que necesites.
Las siguientes son algunas de las diferencias más relevantes entre la tecnología de impresión 3D FDM y la SLA. Recuerda que a pesar de utilizar tecnologías diferentes ambas tienen el mismo proceso productivo. La tecnología de las impresoras FDM consiste en fundir un plástico y darle forma. En cambio, la tecnología SLA consiste en solidificar un líquido mediante un láser.
El proceso productivo de ambas impresoras tiene los siguientes pasos:
Las impresoras 3D de extrusión de plástico funcionan con una gama de filamentos termoplásticos estándar, como ABS, PLA y sus diversas mezclas. La popularidad de la impresión 3D FDM en el espacio de los aficionados ha llevado a una gran cantidad de opciones de color. También existen varias mezclas experimentales de filamentos de plástico para crear piezas con superficie de madera o metal.
Los materiales de resina SLA tienen el beneficio de una amplia gama de configuraciones de formulación: pueden ser blandos o duros, llenos de aditivos como vidrio y cerámica, o imbuidos de propiedades mecánicas como alta temperatura de deflexión térmica o resistencia al impacto. Varias formulaciones de resina ofrecen una amplia gama de propiedades ópticas, mecánicas y térmicas para igualar las de los termoplásticos industriales, de ingeniería y estándar.
En las impresoras FDM, la resolución de la impresora es un factor del tamaño de la boquilla y la precisión de los movimientos del extrusor (eje X / Y). La precisión y la suavidad de los modelos impresos también se ven influidos por otros factores: como la fuerza de unión entre las capas la cual es menor que en la impresión SLA y el peso de las capas superiores puede exprimir las capas inferiores, pueden surgir una serie de problemas de impresión (deformación, desalineación de capas, desplazamiento de capas, contracción de las partes inferiores; para más detalles, consulte este artículo). Estos comprometen la precisión y la suavidad de la superficie.
Las impresoras SLA producen constantemente objetos de mayor resolución y son más precisas que las impresoras FDM. La razón: la resolución está determinada principalmente por el tamaño del punto óptico, ya sea del láser o del proyector, y eso es realmente pequeño. Además, durante la impresión se aplica menos fuerza al modelo. De esta manera, el acabado de la superficie es mucho más suave. Las impresiones SLA muestran detalles que una impresora FDM nunca podría producir. De hecho, los detalles finos que produce una impresora SLA son la razón principal por la que uno consideraría obtener una impresora SLA.
Después de imprimir en una impresora FD, se debe quitar los soportes (si el modelo tiene salientes) y el exceso de plástico con los dedos o con una herramienta de corte. El lijado ayuda a obtener superficies más lisas.
Los modelos impresos en una impresora SLA, están cubiertos de resina adhesiva que debe eliminarse en un baño de alcohol isopropílico. Es por eso que obtienes guantes de goma con la mayoría de las impresoras SLA, para proteger tus dedos de la resina y el alcohol. Dependiendo del modelo, es posible que también se requieran soportes: eliminarlos es tan fácil como con las impresoras FDM.
Una de las diferencias más grandes es sin duda el precio. Podríamos decirte cuál de las dos impresoras podrías elegir por tecnología, pero sin duda el precio es un factor determinante. Por un lado, puedes conseguir una impresora FDM por precios a partir de los 200 euros, y sus filamentos se encuentran por 20 dólares el kilo. Mientras las impresoras SLA son sin duda las más caras siendo su precio mínimo 400 euros y la resina se consigue a partir de los 50 euros.
Aquí te dejo las mejores impresoras tanto de resina como de FDM para que puedas ver las diferencias entre los precios de ambos productos. Nuestra selección cuenta con las mejores impresoras en relación calidad precio. Fuera de estas puedes encontrar impresoras de mayor calidad, pero que están más enfocadas a clientes empresariales, ya que a nivel usuario las calidades de las impresoras que te traemos son más que suficientes.
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